SOS. ADOLESCENTE EN CASA

• Bonito es el instinto maternal, y todo va ocurriendo, van pasando las fases de la luna, hasta que en un momento concreto la luna se establece como llena, con la cara de tu hijo adolescente, era maravilloso hasta que aparecieron los primeros síntomas de los que no dabas crédito, se acabó la ternura, y empezó la mutación, las hormonas se apoderan de él, ya no te mira con ojitos, directamente no te mira, lo llevas en el coche a donde ha quedado con sus amigos, todo silencio e ignorandote, y cuando se apea del coche ni adiós, eso es la adolescencia, te dan ganas de avisar a un exorcista, porque tiene síntomas muy parecidos, no habla, o lo hace de manera compulsiva, sin pensar lo que dice esa boca, le molesta todo menos su móvil con el que va a todas partes, menos claro al instituto que está prohibido, la contradicción siempre, y el entendimiento nulo, sólo lo entienden sus amigos, rebeldía a lo más extremo, y tú a estas alturas, aprendiendo a negociar, porque no queda otra, parece que estás en el mercado de los jueves, y nada no hay quien se ponga de acuerdo con la hora de llegada, después tenemos el sentido de la estética que a estas edades es de lo más peculiar, que dentro de lo que cabe no está mal, pero ¿que pasa con la temperatura corporal?, se trastorna entera, cuando hace 0 grados van en manga corta y cuándo hace 30 grados con doble sudadera, además ningún apego a la vida, como ven la muerte lejana, pues si tienen que tomar medicación, te dicen que para qué, que si se mueren les da igual, y claro tanta energía, tanta eclosión hormonal no tiene escape, ¿Qué hace la sociedad? Pensamos si tienes un adolescente, te  jodes que yo también pasé por ello, ya… pero sin que sea motivo de comparación, en Cabárceno acondicionan a los gorilas, a los niños les ponemos escasos parques de ocio, que como vivimos en Cantabria, utilizan solo cuando no llueve, no están meados y cagados por perritos, a los ancianos , cuatro parques para que se vean atendidos por los políticos de la zona, ¿y a los adolescentes?, ya les dejamos la zona de ocio en beber, fumar, y otros hábitos que lo único que van a conseguir alimentar al monstruo que temporalmente sea instalado en sus cuerpos.No os preocupéis, lo sé, la cordura vuelve, y todo volverá a ser como antes, siempre podemos echar una carrera, ir al gimnasio, tomarnos un paracetamol, o abrir la ventana y gritar…..