cuando amar te rechaza en el acto de vivir.
Amar no es fácil cuando no lo ves ni lo sientes.
cuando estás atrapado en brazos de la tristeza.
Amar no es fácil pero a Amar se aprende,
cómo se aprende a mirar hacia el universo,
con la sorpresa de descubrir un jardín inmenso
que emerge de lo más interno y transciende entre
tus dedos.
Amar es cerrar los ojos y quererlos abrir
para descubrir más y más cielo, un cielo que te
rodea y que también llevas dentro.
Amar es cobijarte en el árbol de tu verdad.
Amar es permitir que las raíces de ese árbol,
protejan el suelo donde pisan los que pasan
tanto los que se quedan como los que se marchan.
Despedir les agradeciéndoles su paso, su tiempo.
Amar es escuchar la música de ese corazón que late,
te calienta y a veces te arde, dejarle que se expanda
y recubra de paz la ausencia de latido,
en cada ausencia preparamos la llanura para el despegue.
En un día soleado de octubre, cuando las hojas purpuras
recubran los paisajes, y el sol se muestre tímido.
Quizás haya un arcoíris o quizás no.
Me dejaré llevar como una hoja de árbol desprendida.
Abandonando me a la inercia de la fuerza del viento.
