El otro día en el congreso de los diputados/as apareció una de las diputadas con una camiseta pro derechos humanos, en la mitad de la camiseta una teta de hombre y en la otra mitad una de mujer, reivindicando que todo el mundo tiene derecho a sentirse hombre o mujer independientemente de que tenga una u otra teta según presunto género.
¿Por qué una camiseta provoca tanta polémica?. Cuándo su mensaje defiende la libertad de sentirte como te de la gana, siendo tuyo el cuerpo y no del de otro.
la presidenta del Congreso Ana Pastor indignada propuso que fueran con mensajes de otro tipo como un cerebro de mujer y no tanta teta. Creo que deberían concentrarse en dar solución a todo lo que nos crea inseguridad diaria, como son los deshaucios, la violencia extrema en los robos, los asesinatos de las mujeres, los pederastas, los raptos, la falta de contundencia en las leyes, los delitos de robos de los políticos, la desigualdad, la pobreza energética, el paro, el acoso escolar y la falta de educación en las emociones en el currículo escolar y un sinfín de problemas que por lo visto no crean tanto escándalo como unas tetas en una camiseta.
Vivan las tetas, dibujadas, en escultura, en todas sus modalidades, por que señora Pastor una teta vale más que mil palabras y en su caso las mil palabras se sintetizan en un MODERNÍCESE y TAMBIÉN que lo haga su partido, por que con tanta intervención retrógrada, creo que su PP necesita salir del armario, un armario que huele a mezcla de humedad y naftalina, necesita abrir la ventana, la más grande de su partido, escuchar a las gentes de este país que les están gritando que con su partido España enmohece.
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