Cerré los ojos para abrir los brazos,
cerré la boca para abrir el corazón,
cerré los límites para abrirme a lo ilimitado,
cerré las condiciones para abrir los horizontes.
Decido caminar escuchando la intuición,
una observación minuciosa que se escapa a la percepción.
Me explayo en una mente cada vez más curiosa,
que se alimenta de ideas, de citas, de anécdotas e historias.
Repaso el presente, estando en nuevas perspectivas,
los sótanos a veces oscuros se transforman en palacios.
Los caminos y callejuelas en jardines fantásticos.
la mirada transciende hacia un infinito diverso.
El tiempo se entrecruza, deja de ser lineal.
los segundos se cruzan con otros segundos,
horas con otras horas, días con otros días.
las montañas se ven de mil maneras a la vez.
Si es que nazco o muero, mil veces sucede.
Cientos de vidas comienzan y acaban con la ilusión
de caminar por caminos distintos de un mismo paisaje.
unos ven las estrellas cada noche y otros las tocan y
bailan con ellas.
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